lunes, 21 de octubre de 2013

DONDE ANDARÁN LOS FOTÓGRAFOS DE AYER


Mi tio y sus sobrinos



“Miren para la cámara” Clic. Este era el ritual más usado por los fotógrafos antiguamente, cuando hacerse una foto era todo un acontecimiento social. Posar no era una cosa cualquiera por lo que había que ponerse la ropa de los domingo o de salir. ¡Nos íbamos a retratar!

Se nos avisaba con bastantes días de antelación de la llegada del fotógrafo y, mientras  contabamos o mejor descontabamos las jornadas que faltaban para el día tan señalado, la espera se nos hacia interminable.

Por fin, llegaba el momento tan esperado. Allí estábamos los más pequeños con una mezcla de emoción y nerviosismo, expectantes a los movimientos e instrucciones del fotógrafo que actuaba con mucha paciencia, aguantando alguna que otra perreta infantil, tomándose todo el tiempo del mundo para componer la escena porque no se podía permitir la licencia de desperdiciar película negativa o quizás, vaya usted a saber, consideraban la fotografía un arte que, viendo algunas fotos de la época no es de extrañar.

Si señor, sacarse una foto era todo un lujo.

Mirando la caja de las fotos (la caja de toda la vida) he elegido las dos que he puesto en este blog: la primera debe tener aproximadamente 60 años de antigüedad y la segunda unos 70 años. Observando las mismas me han surgido algunos interrogantes y la curiosidad por saber quienes eran esos fotógrafos anónimos, su historia, de donde eran, su trabajo, como era su vida...

Me he propuesto buscar información al respecto y prometo ponerla en el blog cuando tenga algo interesante. Por supuesto toda colaboración será bienvenida con el añadido de que puede ser un trabajo colectivo que siempre es más gratificante.


Mi madre y su hermano




No hay comentarios:

Publicar un comentario